Registrar una marca o un nombre comercial es una inversión valiosa

En muchas ocasiones, las empresas se plantean registrar su marca o nombre comercial, y aunque no se le da la importancia que se merece, es una inversión poco costosa que a largo plazo puede resultar bastante beneficiosa para cualquier tipo de negocio.

Puntos fundamentales

Son varios los puntos importantes a la hora de registrar una marca o un nombre comercial – y su logo comercial propio, incluido – que es fundamental para proteger los derechos de la empresa y al mismo tiempo establecer una identidad con bases sólidas de cualquier negocio.

1. Exclusividad y Protección: Tras el registro de una marca o nombre comercial, la empresa adquiere el derecho exclusivo de usarlo y evita que terceros lo pongan en funcionamiento sin tu consentimiento. Es crucial para resguardar la identidad del negocio y evitar confusiones en el mercado.
2. Valor: Al registrar una marca o patente, se consolida el valor del producto o servicio que ofrece la empresa. Este valor se convierte en un activo intangible que contribuye al prestigio y reconocimiento del negocio.
3. Imagen y Reputación: Es lógico pensar que una marca registrada ayuda a reforzar la imagen y reputación de la propia empresa. Los clientes suelen confiar más en marcas reconocidas y que gozan de una protección legal.
4. Acciones Legales: Si alguna otra empresa o negocio infringe los derechos de una marca registrada, se puede emprender acciones legales para protegerla.
5. Disuasión para Infractores: El registro de una marca o nombre comercial disuade a posibles infractores de utilizar dicha marca o nombre comercial de forma fraudulenta. De ahí que realizar este registro es una inversión valiosa para proteger los intereses comerciales de una empresa y asegurar su posición en el mercado.

Asesoría Plaza Benítez asesora y realizarel registro de nombre comercial o marca de sus clientes ante la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM) o en los Centros Regionales de Información de Propiedad Industrial de las distintas Comunidades Autónomas, sea cual sea su titularidad (empresa, asociación, autónomo, etc). Además, al hacer las presentaciones telemáticas, se pueden ahorrar hasta un 15 % en tasas, lo que abarata su registro.

El registro de la marca o nombre comercial tiene una duración legal de 10 años, renovables por períodos sucesivos de otros 10 años. Este registro también permite oponerte al registro de signos posteriores que puedan confundirse con el de la empresa.